“Toma el dinero y corre”: es el lema de las empresas o particulares dedicados a la estafa en mudanzas. El intrusismo en el sector es enorme, y muchas veces se trata de empresas piratas cuando no fraudulentas y delictivas. Lo menos que te puede pasar es que no respondan ante algún desperfecto, porque algunas incluso podrían llegar a robar o secuestrar tus pertenencias exigiéndote dinero.
Nada como el sentido común para eludir sus peligrosas redes y decantarse por una empresa de mudanzas seria y profesional.
7 señales de alerta ante una estafa en una mudanza
1. Sólo admiten pago en metálico
Si habitualmente no admiten pagos a través de intermediación bancaria, puedes empezar a desconfiar. Las tarjetas y las transferencias bancarias dejan patente que la empresa ha recibido un dinero de tu parte y dificultan el fraude fiscal. Si te exigen darles el dinero contante y sonante, siempre siempre en efectivo, harás bien en desconfiar.
2. No hacen contrato, facturas o presupuestos por escrito
A quien comete estafas en mudanzas no le conviene dejar constancia de según qué cosas. Sé inflexible y te ahorrarás el trago de no poder demostrar que se llevaron el cuadro del salón, que no cumplieron con la fecha acordada o que ya pagaste esa señal que te exigen.
3. No son claros con sus instalaciones
Una empresa seria te indicará dónde tiene sus oficinas y/o almacenes, y estará abierta a visitas. También puedes comprobar por internet lo que hay realmente en esa dirección. ¿Te dan largas o aseguran que no tienen instalaciones fijas? Mala señal. Ten en cuenta que las empresas «fiables» cuentan en ocasiones con guardamuebles y trasteros cuya ubicación solo se la facilitan a los clientes para evitar cualquier tipo de contratiempo. Si necesitas un guardamuebles en Madrid, puedes contactar con nosotros y te daremos todo los detalles del servicio.
4. Son “invisibles”
Cuando los empleados no visten un uniforme apropiado para su actividad que los identifique, utilizan embalajes donde no aparece el nombre de la empresa y emplean vehículos sin rótulos corporativos, sospecha que estás ante una de las estafas en mudanzas de las que hablamos. A las empresas legales les gusta la visibilidad, y saben que una mudanza en un edificio de vecinos puede atraer a algún cliente de la finca más.
5.No tienen razón social
La razón social es el nombre de una empresa a efectos legales. Puede no coincidir con la marca de cara al público, pero siempre ha de constar en los papeles que te den a firmar (presupuesto, contrato…) En caso de dudas, exige que te la faciliten: es sencillo comprobar su existencia con una búsqueda por internet o en el Registro Mercantil.
6. Escatiman información acerca de sus garantías
Una empresa de mudanzas que actúa acorde a la legislación estará presta a informarte acerca de tus derechos, los seguros contratados, las asociaciones empresariales de las que forman parte… Las empresas o particulares autónomos que cometen estafas en mudanzas, sin embargo, evitarán tocar estos temas “engorrosos”.
7. ¡Alerta roja!: Tarifas demasiado baratas
Son su principal reclamo, pero también el principal indicativo de que algo no cuadra. Una tarifa llamativamente baja es sospechosa, sobre todo si se ofrece de primeras, sin evaluar antes a fondo las características del encargo: accesibilidad del edificio, número de cajas o volumen de objetos a trasladar…
Las mudanzas económicas son otras cosa… Piénsalo: necesitas una buena relación calidad-precio, no un anzuelo disfrazado de chollo.
5 consejos para contratar mudanzas de confianza
- Recurre al boca a boca. Consultar a tus conocidos puede ser el modo más rápido de dar con lo que necesitas. Pregúntales si la empresa que contrataron actuó con profesionalidad, sus tarifas, cómo solventó posibles problemas y, por supuesto, si quedaron contentos.
- Visita webs profesionales. Las agrupaciones profesionales de empresas de mudanzas sólo admiten aquellas que respeten la legislación. Puedes consultar en su web los directorios de sus miembros, como el de la FEDEM (Federación Española de Mudanzas). Eso no significa que una empresa no asociada sea problemática, pero sí que las que lo están son de fiar, legales y responsables.
- Infórmate en la red. No todas las empresas de mudanzas cuentan con su propia página web, pero si la tiene, visitarla es obligado. Pasa de largo la “literatura” y ve al grano: datos de la empresa, seguros contratados, certificados de calidad… Fuera de su web, busca las opiniones reales de otros internautas sobre ella.
- Exige toda la información que consideres oportuna. Presupuestos por escrito, facturas, seguros, tarifas adicionales que se pudieran añadir al final… Una empresa seria no sólo te los facilitará sin obstáculos, sino que además cumplirá lo estipulado.
- Confía en los veteranos. Obviamente, una empresa que lleva largo tiempo asentada y con incontables encargos a sus espaldas difícilmente será pirata ni se dedicará a planear estafas en mudanzas. Además, contará con la experiencia en su labor y en el trato con el cliente necesarios para ofrecerte las mayores garantías.
Así actúa una empresa de mudanzas profesional
Después de más de tres décadas en el sector, Mudanzas Calleja se ha convertido en sinónimo de confianza. Diversas asociaciones profesionales (FEDEM, OCEM, CETM y FEDEMAC) avalan nuestra honestidad y buen hacer, algo que tú también comprobarás al contratar nuestros servicios de mudanza en Madrid.
Somos una empresa transparente, que te mantendrá perfectamente informado de las condiciones del encargo, y que cumplirá éste con las mayores garantías, desde profesionalidad del equipo humano hasta el empleo de los mejores medios para proteger y transportar tus enseres.
Consúltanos; te lo pondremos tan fácil que ya no podrás ser víctima de una estafa en mudanzas.
